domingo, 27 de enero de 2013

FLIRTEANDO CON EL ASFALTO (II)



<<Calar>>: Penetrar un líquido en un cuerpo permeable. Otra acepción: Mojarse una persona hasta que el agua llegue al cuerpo. Como dice Fernando, ni el “gore-tex” le salvó.

De nuevo se hacía necesario repeler los caminos por el exceso de barro acumulado y recurrir al asfalto. Éramos citados Paco, Antonio, Ángel, Fernando y servidor (José Manuel) a las 10 en el Romano. Fernando no llegaba y cuando ya casi marchábamos apareció por “fondo sur”, le había dado por ir a buscar a Paco a su antiguo refugio, o dicho de otra manera, quería hacer unos kilometrillos de aperitivo “a mayores” de su escapada en la mañana del sábado. Nuestro Capi (Juan Miguel) se disculpó a última hora por una lesión en el pie (se le espera pronto).

Como es habitual ¡hay que hacer algo distinto! Así que nos vamos hacia Matilla de los Caños y… ya veremos. Para empezar a calentar muslos en la cuestecilla de Vistahermosa y marcha siempre ascendente y con viento en contra hacia el Pirulí. Antonio hace unos “esbozos” por el camino paralelo, pero pronto desiste por la acumulación de agua y barro y vuelve al empalagoso asfalto. ¡Bahh! ya que estamos aquí subiremos al “Pirulí” y para allá que vamos, hay que hacer alguna foto aquí arriba. Saludamos de paso a un grupo de “colegas” que dan por finiquitada la jornada, pues empieza a llover.

A nosotros esto se nos hace corto, así que ponemos el “chubas” (los que lo hemos traído) y optamos por hacer unos kilometrillos más en dirección a Matilla. La lluvia arrecia pero no hay problema, como dicen mis amigos africanos “la lluvia moja las manchas del leopardo, pero no las quita”; Fernando insinúa que la calada será beneficiosa para nuestro maltrecho cutis. A todo esto llegamos a la urbanización de Muñovela, junto al campo de golf: otra paradita (sin fotos).

Sigue lloviendo y todavía queda mucho hasta Matilla por lo que decidimos hacer cinco kilómetros más en esa dirección y regresar. Algunos trataron de “boicotear” el acuerdo, pero nuestro “router” Fernando, siempre muy atento, abortó las intentonas. Llegado el punto de retorno agilizamos la marcha, ahora en ligero descenso con viento a favor y por si vamos lento, decidimos dar relevos ¡Qué báaaaarbaro! En un momento estamos de nuevo en el Pirulí, aunque esta vez pasamos de largo y en un “tris-tras” dejamos a Antonio en Vistahermosa. El matrimonio “De Dios” nos quiso premiar con un caldito caliente, pero lo que todos necesitábamos era llegar, quitarnos la calada y la “duchita” de rigor.

Hay que reconocer que estamos un poco “trastornados” saliendo días como hoy, pero “toda cuestión tiene dos puntos de vista: el equivocado y el nuestro”.

¡Ciao!  





domingo, 20 de enero de 2013

FLIRTEANDO CON EL ASFALTO (I)




Dijo Franklin D. Roosevelt: “Es de sentido común elegir un método y probarlo. Si falla, admitirlo francamente y probar con otro. Pero, sobre todo, intentar algo.”

Y así de perseverantes somos los de “La Pájara” y como los caminos no están para aventuras, algo hay que hacer… Quedada a las 10 como de costumbre en el Romano. Puntuales como de costumbre Paco, Fernando, Antonio, Ángel, Juan Miguel y José Manuel. Como es habitual, es decir, como de costumbre hay que hacer algo distinto, y Paco propone hacer al revés la del domingo pasado (para que sea distinto), pero el “Capi” pone el grito en el cielo alegando que el aire nos va a machacar, que no vamos protegidos, etc… y sugiere una ruta alternativa, según él, “más protegida del viento”.

Salimos pues por Tejares para tomar la carretera de Vitigudino, “siempre con viento en contra, sin ninguna protección, y sin protestas”. Fernando nos marca un ritmo fuerte, pero al ver que Ángel no puede seguirnos con facilidad decidimos minorar un poco la marcha. Antes de llegar a Golpejas vamos pendientes a las indicaciones de “El Capi” para tomar un desvío a la derecha que nos lleva a una carretera estrecha, sin viento en contra y con “lindas instantáneas entre el ganado en las verdes praderas llenas de encinas”. (¡Qué poético!) No hay más remedio que hacer una paradita para fotos.

Llegamos a Vega de Tirados y la ruta nos dirige a San Pedro del Valle, punto inédito para Antonio y Ángel, por lo que decidimos entrar a mostrarles la fuente romana. Fotos de rigor, repostaje y cruce de opiniones con una pareja de “los amigos de la bici”. Luego de que Antonio me diera a conocer “sus prioridades lúdicas” con respecto a las experiencias de los citados “amigos de la bici”, decidimos regresar por la carretera de Florida. Ahora hace “un frío que pela”, más que esta mañana, así que Fernando acelera y los demás “tu-turú-turú-turú tu ru”… a seguirle.

Como la ruta es cómoda vamos dejando Carrascal de Velambélez, Pino de Tormes y Florida de Liébana. Pero hay que dejar algo para postre, así que decidimos subir “la Papelera” a ritmo de Ángel, que viene castigado (hay quien lo achaca a que su nueva máquina está equipada con “platos limosneros” y por eso no da más de sí, ya veremos…) ¡En fin! No tuvo suerte el debutante en la dichosa cuesta: primero se le sale la cadena y después pinchazo. Menos mal que viene acompañado de Antonio, alias el “Bujías de la bici” por sus dotes mecánicas. Fernando y yo nos hemos adelantado, lo que aderezado con las gotas de lluvia provoca que no prolonguemos la espera, ya que Ángel está en buenas manos.

¡Hasta otra!













domingo, 13 de enero de 2013

CARRETERA… ¿Y MANTA?



CARRETERA… ¿Y MANTA?

<<Frío en el invierno y calor en el verano, eso es lo sano>>

Así que había que salir y echarle un par de… Los “quedantes” a las 10 en el romano fuimos Juan Miguel (de rojo con matices culés), Nicolás (de amarillo y vino, que bebió ayer), Paco (de negro,  apodado desde hoy “el pingüino”, porque en vez de bici parece que va en moto) y un servidor, José Manuel (de negro, con mangas rojas y sin letras, …todo pagado). Se ausentó Fernando, que en su salida sabática se confío y “Don Eolo” lo castigo en exceso ¡… a un muchacho con tu experiencia! También eché de menos a Antonio <<El cheff>>, a Ángel y a otros que no menciono…

Paco Sánchez se erigió en “router” y como había barro optó por “hacer algo diferente”. Ya le dije que… “montárselo con un tío” también es hacer algo diferente y no le da por esas, pero bueno.

Comienza ruta por Tejares para coger la antigua N620 con bastante viento en contra, que unido a la temperatura del mismo y a las rampas hicieron esta parte dura, muy dura… para todos, excepto para Paco. Menos mal que al entrar en la nacional no hay desniveles y nos limitamos a pelear contra el viento. Me lloran los ojos, se me caen las velas… ¡Hay que joderse, qué frío hace! ¿No tendréis por ahí una manta? Juanmi protesta, Paco replica – ¡Tranquilos! En cuanto lleguemos a aquel letrero del Corte Inglés giramos a la derecha y se acaba el viento en contra. Pero… ¡Qué lejos estaba el dichoso cartel!

¡Ufff! Por fin en La Rad nos desviamos y salimos de la N620 por la izquierda para ir por la derecha hacia Galindo y Perahuy, pero… el viento sigue en contra. Paco se adelanta como siempre para que NO nos aprovechemos de su rebufo, así que… ¡Todos a sufrir! En Galindo paramos junto al campo de futbol, unos llevan las manos heladas, otros los pies, otros todo. Repostamos y Paco nos marca el resto de la ruta. A regañadientes de alguno y tras consultar a D. Aniceto (ciclista del lugar) se acepta la propuesta y seguimos ruta con dirección a Barbadillo, que está ahí mismo.

Giramos a la derecha, el viento empieza a favorecer y así llegamos a Rollán. Seguimos hacia Golpejas, donde visitamos las casetas del “Javi” que aguardan allí hasta la próxima feria de día. Tomamos la carretera de Vitigudino en dirección a Salamanca y por fin el aire nos favorece de lleno, aunque unas gotas de lluvia amenazan con <<chafar>> la última parte de la ruta. Bueno, las gotas de lluvia y Paco, que se pone en cabeza y marca un ritmo demoledor que nos pone en Doñinos en “un periquete”. ¡Qué baaaarbaro!

Desde Doñinos volvemos a bajar por Tejares y como dice Paco, “cada mochuelo… a su olivo”. Como marca el dicho que pone título a esta crónica, hubo mucha carretera, pero echamos de menos la manta. 

 

lunes, 7 de enero de 2013

BAUTIZADOS




BAUTIZADOS (by Paco Sánchez)

A pesar de haber salido el sábado 5 de enero, había quien sentía la necesidad de hacer otra escapada dos días después.

Así que dicho y hecho.  Quedada hoy lunes día 7, que es festivo en Castilla y León, a las 10’00 en Cruz Roja.   No se había hablado con antelación de la ruta,  pero al llegar allí parece que Juan Miguel y Fernando ya tienen alguna idea en la cabeza. Hay algo de prisa, no se puede volver tarde, así que la etapa tiene que ser corta.  Si a eso le unimos que se quería “bautizar” a algunos colegas que últimamente nos acompañan, el destino ya estaba claro:   el monumento a Colón, que según dice el capi Juanmi, es el lugar apropiado para los bautizos.

Así que hacía allí nos dirigimos Fernando, Juan Miguel, Angel, Antonio, Nicolás y los dos Pacos (Martín y un servidor, Sánchez).   Pasamos el Helmántico y cogemos el camino que sale a mano izquierda, para llegar enseguida a Aldeaseca.  Hay un poco de niebla, pero parece que va a levantar en breve.  Seguimos el camino, girando a la derecha al pasar bajo la autovía de Zamora, con parada para fotos.   Antonio aprovecha que ve un tobogán, y se lanza cuesta abajo, pero no puede con la cuesta arriba que sigue, y no se la pega de milagro.   Hubiésemos llamado la zona la de la “Sebastiana” de Antonio.   Pero consigue poner pie en tierra a tiempo.   Ni siquiera nuestro osado amigo Martín se atreve a emularlo.
Los Bautizados

Seguimos camino hacía Castellanos de Villiquera,  de dónde salimos dirección oeste hacía la finca de Valcuevo.   Allí nos desviamos a la derecha.   Vemos un charco tremendo en el que unos cuántos lo pasamos mal.  Paco Martín se cae,  yo casi  (si no planto el pie en el barro me la pego), y Fernando se arrima tanto al borde que se pica con la valla.   Los mejor parados son los que han pasado por el medio, por el agua, donde no hay tanto barro.  

Poco después, ascenso al monumento a Colón.   El único que no lo supera,  Martín.  No le va el cambio.  No me extraña.  Su máquina necesita algo más que una puesta a punto.  Hace unos ruidos muy extraños.  Cualquier día se cae a pedazos.

En el monumento situado en el alto,  fotos como recordatorio del bautizo de los novatos que no conocían la zona (Angel, Antonio y Nicolás).

Al bajar,  salimos dirección Mozodiel de Sanchánigo,  y después hacía la urbanización los Almendros.   Paco Martín se marcha,  la ruta ya se le hace larga, y eso que es la más corta en meses. Los demás seguimos por el Camino del Canto, pasamos bajo el Puente Gudino, y seguimos por el paseo fluvial hasta el hotel Doña Briguida.  

Desde ahí hay que subir el puerto, que ahora parece que se llama “el de la Sebastiana de Jesús Galán”.   Como siempre en estos casos, cada uno a su ritmo.  En el alto,  despedida,  cada uno a su casa y Dios a la de todos.










sábado, 5 de enero de 2013

Un, dos, tres... CUATRO CALZADAS




Queridos Reyes Magos:

La mañana está fría, pero soleada, lo que hace presagiar que la temperatura aumentará con las horas. “La nueva” nos aguarda deseosa a la par que bella y radiante, no me cabe ninguna duda sobre sus intenciones… la nueva “Orbea” de Ángel quiere ser “montada” hoy mismo. Y un acontecimiento de esta magnitud merece que el trazado, la compañía, las condiciones e incluso los detalles accesorios estén a la altura del mismo.

No es de extrañar por tanto que el grupo fuera numeroso hoy: Paco y Pablo Sánchez, Antonio de Dios, Nicolás, Fernando, Juan Miguel, José Manuel y… como no Don Ángel con su nueva “Draisiana”. Fernando ha diseñado un recorrido inédito pero “blando” sobre el papel, porque el debutante Ángel lleva tres meses en el dique seco: quedada a las 10 en el Romano y carril bici hasta Aldeatejada para salir por el camino dirección Las Torres, pero desviarnos antes a la derecha buscando un camino paralelo a la autovía que sospechamos puede llevarnos hasta Cuatro Calzadas.

Con algún que otro despiste y superando continuos toboganes nos vamos acercando al objetivo. Momento para las primeras instantáneas donde veo que Ángel efectivamente nota la falta de forma y sufre en las cortas, pero duras rampas que vamos sorteando. Pasado el cruce con la ruta de Ariseos el camino se estrecha y embadurna ligeramente ¡Hay que hacer dura a nuestra nueva amiga desde el primer día! Lo que no esperábamos es que súbitamente se terminara, pero esto fue lo que realmente pasó.

Tras arduas negociaciones entre “los capos” acordamos continuar por el “monte bajo” - a ratos andando - buscando el camino que se ve allí abajo.  Las protestas de Juanmi son aceptadas y nos dirigimos a la caseta que se ve a la derecha aunque eso signifique retroceder algunos metros. Oigo algunos disparos de fondo y pregunto si los sábados hay caza, porque sospecho que corremos el riesgo de ser confundidos con “conejillos” de monte. ¡Ufff! ¡Por fin en la casita de la pradera! ¡Bonito paraje! donde los cazadores tienen su “cairn” para apostarse con la escopeta y sorprender a sus víctimas. ¡Menos mal que no había ninguno! Hay que hacer fotos aquí.

Bueno, seguimos el camino para enfrentarnos al último repecho antes de llegar a nuestro objetivo por los chalets a medio construír ¡Pena de crisis!... La de los constructores, porque nosotros hemos decidido disfrutar de un platito de “ibérico” y una “jarrita” de tinto, que para eso vienen sus altezas a la noche. ¡Esto es vida! (ver foto).

El regreso tiene que ser más cómodo, que hemos castigado a Ángel en exceso, así que optamos por el asfalto hasta girar a la izquierda por la carretera de Monterrubio de la Sierra y luego a la derecha para tomar el camino de Ariseos. Animamos a Ángel por estas últimas rampas y afrontamos el prolongado descenso hasta prácticamente Aldeatejada, donde se despiden Paco y Pablo por las molestias de este último en la zona lumbar. El resto afrontamos el pequeño repecho a la cruz de Santiago para hacer las últimas fotos y regreso por el carril bici.

…las deportivas no han quedado muy limpias, pero espero que lo entiendas, mi querido “Baltasar” y la mirra sea proporcional a mi voluntad.
¡Ciao!